el Ministro de la Reforma Liberal, don Ramón Rosa se dirige a las autoridades municipales instándolas para que hagan “todos los esfuerzos posibles para mejorar y conservar los caminos”. Considera que valen más las mejoras materiales que todos los planes políticos imaginables. Sin embargo, las malas comunicaciones fueron causa, en gran medida, de la poca expansión del cultivo del café en Honduras, como estaba ocurriendo en los otros países del istmo.